Hoy en día vemos cómo se deslocalizan las empresas que, en su afán por conseguir más ganancias, se trasladan a países menos desarrollados en los que los salarios sean más bajos para poder ahorrarse dinero en nóminas. Además estos países suelen tener una ridícula, o nula, legislación laboral, por lo que los trabajadores se encuentran en situaciones precarias, de casi esclavitud, y se pueden contratar niños. También sufren los animales que utilizan en la ropa y tampoco suelen tener muchas medidas de contaminación y protección al medio ambiente. Pero no todo es negativo, en la siguiente noticia podéis ver cómo, gente preocupada por este asunto, han diseñado una etiqueta que asegura que esa marca no utiliza el trabajo infantil para fabricar sus productos. Esta etiqueta ha sido creada por una organización neozelandesa, sin ánimo de lucro, llamada Child Labour Free. Las empresas que tengan estas etiquetas han debido someterse a una inspección por parte de Ernst & Young para que aseguren que, ni las propias empresas ni sus proveedores hayan utilizado trabajo infantil.
Igual que existe esta organización también existen otras de protección al medio ambiente, como el logo Cruelty Free que podemos buscar en los productos de belleza, en los que nos aseguran que no han sido probados en animales. Esta es una manera de empezar a concienciar a la gente de lo que pasa en otros países y de lo que tienen que sufrir para que nosotros tengamos los productos aquí. Así cuando compremos ropa y maquillaje podremos buscar estas etiquetas y potenciar las empresas que cumplan estos requisitos.
Aunque es un gran paso no podemos parar aquí, ya que hay otros muchas injusticias, como las que hemos mencionado anteriormente, que necesitan de gente que se comprometa con la causa y de verdad quiera luchar por los derechos de otras personas. No es fácil pero es necesario y el problema es que hay muy poca gente dispuesta a ello. Para poder cambiarlo todos debemos de concienciarnos y dejar de ignorar lo que hay detrás de cada prenda que nos ponemos. Ya que se han creado estas organizaciones hay que aprovechar su trabajo y esfuerzo y poder darle su fruto, promoviendo que acabe con el trabajo infantil.
En mi opinión va a ser muy difícil acabar con todo este asunto ya que hay muchas personas a las que no le importa mucho lo que les pase a otras y, además, la ropa con esta etiqueta es escasa, por lo que no van a dejar de comprar ropa hasta que vean alguna con la etiqueta. Poco a poco iremos cambiando estas situaciones como hemos cambiado otras igual de malas durante la historia, así que entre todos tenemos que apoyar estas propuestas y, si llegamos a estar en la situación de los dueños de estas empresas, pensar antes en los derechos humanos, animales y medio ambientales que en el dinero.